Aquél que se puso serio

Émile Durkheim

Sociólogo y antropólogo francés. Nació el 15 de abril 1858 en Êpinal (Alsacia) en el seno de una familia judía, hijo y nieto de rabinos judíos. Falleció el 15 de noviembre de 1917 en Paris.

Se licenció en filosofía en 1882 para luego dedicarse plenamente a la sociología.

Durkheim es considerado uno de los padres de la sociología junto con Karl Marx y Max Weber. Fundó el primer departamento de sociología en la Universidad de Bourdeaux en 1895. En 1895 publica Las reglas del método sociológico y en 1896 creó la primera revista dedicada a sociología L'Année Sociologique.

Durkheim propone dos tesis sin las que la sociología no sería una ciencia: 1) Se debe tener el objeto de estudio el cual son los hechos sociales. . 2) Se debe respetar aplicar un método objetivo científico, argumentó que las ciencias sociales, al igual que las ciencias naturales, deben abordarse con el mismo riguroso método científico. Este método debe evitar a toda costa los prejuicios y juicios subjetivos. Este pensamiento de Durkheim fue considerado revolucionario para su época.

Perfeccionó el positivismo de Comte promoviendo el realismo epistemológico y el método hipotético deductivo. Durkheim sostiene que la sociología es la ciencia de las instituciones y su objetivo es descubrir “hechos sociales” estructurales. Fue el mayor exponente del funcionalismo estructuralista.

Obras destacadas

·        1889 Élements de sociologie

·        1893 De la división du travail social (Tesis de Durkheim; traducida al español en 1928)

·        1895 Les règles de la méthode sociológique (traducida al español en 1912) 1897 Le suicide (trad. esp. en 1928)

·        1912 Les formes élémentaires de la vie religieuse (existen traducciones española y catalana)

·        1925 Sociologie et philosophie (póstuma)

·        1928 Le socialisme (póstuma

CONSIDERADO PELIGROSO POR TOMAR EN SERIO A LAS CIENCIAS SOCIALES:

Durkheim no sólo se atrevió a culpar a la sociedad por los suicidios humanos sino que encima creyó que las ciencias sociales podían ser cuantificadas. ¡Qué osadía! Ahora se rumora de la existencia de sujetillos con gorras y morrales que tocan puertas y no es vendiendo biblias sino CUESTIONANDO A LA GENTE. Recaban datos para analizar a la sociedad. Vaya, incluso esas encuestas muestran la cantidad de sociólogos que andan por ahí al acecho. Siempre estudiándonos y analizándonos. Qué necesidad de basar todo lo que decimos en estadísticas.

A Durkheim se le ve hasta en la sopa. Los movimientos sociales y la demanda al poder y a la sociedad en general vienen de sus depresivas ideas sobre las personas que se quitan la vida. Durkheim abrió los ojos de muchos (según sus seguidores) en el sentido de que ahora la turba de gente infeliz puede tomar datos y construir excusas para revelarse y nunca -¿Por qué, Señor, porque?- conformarse.